LAREDO, TX - El viernes 28 de abril de 2023 La Agencia de Protección del Medio Ambiente de EE.UU. (EPA) abrió comentarios públicos sobre una propuesta para conceder la solicitud del Estado de Luisiana para la responsabilidad primaria - o primacía - de la Clase VI pozos de inyección de dióxido de carbono en el marco del Programa de Control de Inyecciones Subterráneas (UIC), que está diseñado para proteger las fuentes subterráneas de agua potable.
El estado de Luisiana, al igual que Texas, está experimentando hundimientos y levantamientos como resultado de las operaciones de los pozos de inyección. Al conceder la primacía de Clase VI a las agencias estatales de petróleo y gas, como la Comisión de Ferrocarriles de Texas, la EPA está otorgando aún más responsabilidad y autoridad a organismos reguladores ineficaces que no abordan adecuadamente los problemas ambientales actuales.
En virtud de la Ley de Agua Potable Segura, la EPA debe garantizar que las fuentes subterráneas de agua potable estén protegidas de la contaminación por el dióxido de carbono almacenado en los pozos de Clase VI. Se han registrado casos de migración "accidental" de penachos en el marco de los programas UIC de clase II gestionados actualmente por los Estados, en los que los modelos de penachos de fluidos y gases han resultado inexactos, con consecuencias devastadoras y costosas. Otorgar al Departamento de Recursos Naturales de Luisiana y a la Comisión de Ferrocarriles de Texas autoridad sobre más permisos de pozos de inyección de dióxido de carbono permitirá el despliegue comercial generalizado de infraestructuras de CO2, exponiendo a nuestras comunidades a más riesgos que estas agencias han demostrado que no están preparadas para prevenir.
